viernes, 16 de abril de 2010

Chefjec se adentra en su Boca de Lobo

Boca de Lobo de Chefjec

Lector crítico, lector que mantiene una intensa relación con las novelas definidas por la insatisfacción pero en verdad no le gusta ninguna, pareciera que las novelas son su patrón comparativo, las experiencias deben ser contrastadas no con experiencias anteriores sino con libros leídos, establece un sistema patrón comparativo donde las experiencias reales solo pueden ser intelegidas por contrastes con lo que fue leído en las novelas y en ese sentido elige la novela por que ese es el género que el muestra cultura y que desde hace uno siglos se define en función de su capacidad representativa es propio de la novela ese carácter representacional solo que esa representación es defectuosa casi siempre no siempre la novela habla de la novela en términos defectivos lo dominante es que si las evaluaciones son críticas. Entonces por un lado teníamos la composición del narrador, su patrón gnoseológico, esto que me pasa demuestra comparado con la novela que leí que la novela se equivoca que las novelas son falsas. Por lo tanto, no se establece un patrón de comparación entre dos experiencias reales o novelas –experiencias ficcionales- sino que se comparan mi vida y las novelas que leí o esto que viví con las novelas que leí. En segundo lugar el leitmotiv: he leído muchas novelas, en su recurrencia da una especie de ritmo, una especie de unidad al relato, así que ahí opera al nivel de lo formal. En tercer lugar uno de los efectos de la aparición de ese leitmotiv tiene que ver para la construcción de la naturaleza diferente, hay cosas que son del orden de la realidad y hay cosas que son del orden de la ficción, por ejemplo: he leído muchas novelas donde el protagonista no percibe la diferencia entre lo falso de lo verdadero, pues bien, junto a Delia yo comprobaba que tales confusiones eran inexistentes. De las novelas que he leído no recuerdo una sola que haya tomado partido por la verdad . Son varias las novelas en donde el carácter y la naturaleza se manifiestan en el rostro de una persona se lee el retrato se ve el alma pero la verdad es que los rostros dicen lo propio y lo diverso a veces lo contrario jamás una sola cosa.
He leído varias novelas que intentan resolver el sentido de estas palabras, préstamo, deuda no sé si lo consiguen en todo caso ninguna plantea una forma de préstamo o deuda parecida a lo que Delia depositaba en ellas, he leído muchas novelas en la que los personajes esto con Delia no sucedía. Leí la novela en que los préstamos eran así, la experiencia con Delia me demostró que no. “He leído muchas novelas donde la oscuridad es el reflejo invertido de lo claro, este no era el caso.” La novela de golpe tiene un movimiento para mi fabuloso por que esta tercera función del leitmotiv – he leído muchas novelas- permitía definir la naturaleza del retrato que estamos leyendo, es decir este relato no es una ficción, yo he leído muchas que hacen esto, esto no es una ficción, por lo tanto, es otra naturaleza del lenguaje, se corresponde punto a punto con una realidad pasada, la historia con Delia y presente de la enunciación. Al final de la novela el relato hace un movimiento de extrañamiento para pensarlo en términos estéticos que lee la propia historia como si fuese la novela, en donde el relato se lee a sí mismo, ejemplo p.186: cuando queda algo termina desapareciendo más rápido que tarde.
Profesor da un ejemplo: y el ejemplo es la novela que estamos leyendo, el relato que estamos leyendo; se trata de un hombre y una mujer, ella esta en edad de asistir al colegio pero trabaja en una fabrica, él es bastante mayor - desde ese punto de vista podría ser el padre aunque por varios otros motivos no podría serlo nunca, el hombre tiene los típicos rasgos de los personajes de novela, edad indefinida y todo lo demás, el carácter es una sola imprecisión como también digamos su voz, en el amplio sentido de la palabra o procedencia, seres insignificantes imitados por una serie de circunstancias, ambos se enamoran, decir amor es poco, se idolatran... Es decir lo que estamos viendo es el resumen de lo que ya leímos, ese fragmento de la novela, se cierra con: no, no me importa el fin de la historia la separación de las personas, etc Ese no me importa tiene que ver con la idea de suspenso que estuvimos trabajando, pero además si en casi toda la novela, las referencias: he leído novelas demostraba el carácter no ficcional de lo que estamos leyendo, la puesta en abismo final lo que hace es volver a desestabilizar la naturaleza del relato porque el relato ahora si descubriría de alguna manera su propia imprecisión, su propia falencia, es en un punto como una novela más, por lo tanto, todo lo que ha sido aplicado a novelas como: nunca se han preocupado por la verdad termina afectando al propio relato que estamos leyendo. De alguna manera el relato al final se revela como equivalente a las novelas, como equivalente a las defecciones que fuimos acumulando a lo largo de todo el relato o leído al revés, por que uno podría decir esa puesta (...) demuestra que este relato también es defectivo o podríamos decir lo contrario, todas las novelas muestran su carácter parcial de verdad, por que se parecen a este relato que estamos leyendo, es indecible; convertir a este relato, reducirlo a una novela más, afecta la naturaleza no ficcional del relato, pero en otro sentido puede ser lo contrario, es decir todas las novelas demostrarían, sus relativos, su parcial grado de verdad, su naturaleza no absolutamente ficcional, de toda manera que aquello que había parecido pleno, lo real, la ficción vuelve a caer en el pozo de indeterminación.

No hay comentarios:

Publicar un comentario